Te conocí, ciudad antigua y moderna,
Mezclado con edificios y época,
Me esperaste allí, tu callecita empedrada,
Imaginando amor, marchamos a corazón,
Solo faltaban miradas para sentirnos.
Enseñándome tu pueblo, tu calle, tu casa,
Me llevaste de la mano sin soltarme,
Una plaza un jardín, pájaros y flores,
Un banquito, alejado, un árbol y su sombra,
En aquel rincón por primera vez sentí tu boca.
Nuestro primer día de aventura al conocernos,
Llegada la noche, me presentaste tu cielo,
Tu hemisferio, tus estrellas, nuestra luna.
Perspectivas celestes, más cerquita de la luna.
El lucero de tu sueño de la noche a la mañana.
La noche… un calor tibio, caricias exploradoras,
Tu labio acaramelado, tu cuerpo me enredaba,
Un castillo soñado, yo tu rey, tu mi reina.
Un caballo blanco, montados en el deseo,
Recorriendo tus rincones, ese fue nuestro primer encuentro.
Charly Gómez Re
04/11/09
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